La gestión de casos legales relacionados con ciberdelitos, ya sean difamaciones, violaciones de privacidad o estafas online, entre otros, es delicada. Además, al ser un ámbito de legislación cambiantes, puede ser complicado seguir los procedimientos regulatorios apropiados y las estrategias llevadas a cabo en otros casos.
Y aquí la inteligencia artificial puede ser de ayuda. Sin embargo, conviene tener en cuenta algunos aspectos para utilizarla adecuadamente.
Evaluación preliminar
Antes de emprender acciones legales, es crucial realizar una evaluación preliminar del caso para determinar su viabilidad. En esta tarea la IA puede apoyar la labor del abogado, que deberá atender a dos elementos fundamentales.
- Identificar la jurisdicción aplicable: dado que las plataformas de redes sociales operan a nivel global es fundamental determinar en qué jurisdicción se presentará el caso, basándose en la ubicación del acusado o acusados y del demandante. También es importante analizar si el demandante quiere abrir un caso contra una persona, una organización o una empresa.
- Documentar el contenido ofensivo: guardar evidencia del contenido cuestionado es vital. Esto puede incluir capturas de pantalla, enlaces activos, registros de mensajes o llamadas o incluso datos archivados proporcionados por la propia red social. La volatilidad del contenido en línea hace que esta documentación sea crítica. En este punto también debe comprobarse la veracidad de las pruebas, ya que muchos contenidos en la red pueden ser posteriormente modificados o incluso ser completamente falsos.
Mecanismos internos
Antes de proceder a acciones legales, conviene explorar las políticas y mecanismos de denuncia de las plataformas:
- Reportar el contenido infractor: las plataformas de redes sociales suelen tener procedimientos para reportar contenido que viole sus términos de servicio, incluyendo la difamación y la invasión a la privacidad. Si la plataforma acepta la denuncia, borrará el contenido en cuestión.
- Solicitud de eliminación: en casos de violación de derechos de autor o difamación, se pueden utilizar procedimientos legales ya predispuestos para intentar eliminar el contenido, como la solicitud de retirada DMCA (un protocolo que solicita la retirada de contenido copiado en Estados Unidos).
Acciones legales
Si el contenido ofensivo persiste tras una petición o la situación es grave, se pueden emprender acciones legales formales:
- Enviar cartas de desistimiento: una carta formal que exige el cese de la conducta infractora y la eliminación del contenido puede ser un primer paso efectivo. Además, si el caso va a más, es positivo tener pruebas de una solicitud de desistimiento anterior.
- Demandas por difamación, invasión de privacidad, violación de derechos de autor o estafas online: dependiendo del caso, presentar una demanda legal puede ser apropiado para buscar reparación por los daños causados o eliminar el contenido ofensivo.
Negociación
En algunos casos, la negociación puede ser una vía efectiva para resolver disputas sin recurrir a un juicio. Estas opciones pueden ser más rápidas y menos costosas, y permiten encontrar soluciones creativas que satisfagan a ambas partes. De esta manera, llegar a un acuerdo entre los involucrados puede ser la solución más eficiente y satisfactoria.
Dado el constante cambio en las leyes digitales y las políticas de plataformas, mantenerse actualizado y aprovecharse de los beneficios de la inteligencia artificial es esencial. El empleo de estas herramientas puede reducir la carga de trabajo y aumentar la eficiencia de los abogados.
