Tras las últimas novedades sobre una nueva apuesta estratégica con la resurrección de Alexa, Amazon muestra una nueva carta bajo la manga y que va en serio en su apuesta por la inteligencia artificial con una inversión de 100 billones de dólares en la próxima década en data centers, según el Wall Street Journal.

La apuesta de bucear en la IA y a una lucha a dos frentes contra Microsoft y Apple comienza con un plan estratégico a largo plazo. En primer lugar, la inversión en infraestructura para su e-commerce queda en un segundo plano con un único objetivo: "sumergirse" - en palabras del propio John Felton, director financiero de Amazon Web Services, para el WSJ- en la carrera por la IA y generar un aumento de su propia nube. Y la jugada de Amazon tiene lógica: si bien la gigante de Jeff Bezos ha abierto data centers durante los últimos años, el potencial de la IA ambiciona y la compañía se siente obligada a encontrar la fórmula para dar vuelta esta partida.

Con la creciente demanda de infraestructura de IA, Amazon y otras compañías tecnológicas han enfrentado dificultades para obtener las partes, propiedades y la energía que requieren los centros de datos con supercomputadoras. En respuesta a esto, Amazon ha explorado el uso de energía nuclear para satisfacer sus necesidades energéticas, destacando la magnitud y complejidad de sus requerimientos técnicos.

La apuesta en el ámbito de data centers se ve reflejada en también en los ejecutivos de la gigante de Seattle, que se ha rodeado de expertos en el ámbito de conexiones y nubes. La previsión inicial de la empresa es agregar al menos 216 nuevas infraestructuras de data centers, siendo tres de ellas en Aragón (España).

Andy Jassy, CEO de Amazon, ha reorientado la empresa para enfocarse en productos de IA en sus diversos negocios. Jassy ha mencionado que la IA generativa podría ser un elemento crítico de su próximo pilar de crecimiento, sumándose a su negocio de comercio en línea, Amazon Prime y AWS.