Zaragoza va a ser 'smart city' en 2030. Esa es la idea que tiene el Ayuntamiento de la capital aragonesa con su estrategia Zityverse utilizando la Inteligencia Artificial para ser climáticamente neutra. La primera inversión tendrá lugar antes de que termine el año con cerca de 9 millones de euros para estrenar un asistente digital y crear el gemelo digital del Casco Histórico, una réplica virtual para ensayar cambios en el distrito antes de llevarlos a cabo.
La ciudad, explican desde el consistorio al Heraldo de Aragón, se encuentra en un "punto de inflexión crucial". El Gobierno de Zaragoza va a "fortalecer, expandir y proyectar la imagen real de una ciudad digitalmente avanzada".
El concejal de Transformación Digital, Miguel Ángel García Muro, ha explicado el despliegue de 'Zityverse', que tendrá una supervisión y evaluación periódica del Ayuntamiento de Zaragoza. En los 70 millones no se incluye la aportación público-privada ni los Fondos Europeos. El Ayuntamiento ha sido "ambicioso" y esperan que la capital aragonesa sea pionera gracias a su aplicación.
El plan
Zityverse busca modernizar la ciudad mediante cinco pilares: compromiso con el ciudadano, eficiencia de usuario y ciberseguridad, gestión inteligente de la ciudad física, análisis de la ciudad social, y la integración de la metaciudad. Con este plan, Zaragoza busca impactar de manera positiva en el ciudadano y en la Administración con más eficiencia interna municipal, más calidad de vida de los ciudadanos y ser más atractiva.
Los zaragozanos contarán con todos los servicios en una única app intuitiva y fácil de usar. Esta futura app estará integrada por un chatbot basado en IA que ayudará a los ciudadanos con las gestiones con la administración pública de la ciudad y también mejorará la productividad y seguridad digital de los trabajadores.
Su aplicación práctica hará que la IA ayude a los empleados públicos en la búsqueda de información sobre políticas internas, leyes aplicables, búsqueda de documentos relacionados, etc. En consecuencia, se producirá una reducción de la tramitación manual.
Se apuesta por un uso inteligente de la ciudad física. En este sentido, se utilizarán gemelos digitales (réplica virtual de la ciudad) y tecnologías IoT (internet de las cosas) para gestionar eficientemente los recursos urbanos. Esta tecnología se basa en tener un modelo de Zaragoza en la pantalla sobre el que trabajar para construir predicciones y tomar decisiones.
El primer gemelo digital será el del Casco Histórico y la empresa encargada de mapear ese gemelo lo hará al más puro estilo Google Maps, con coches y con mochilas con cámara para realizar un inventario de todas las calles y rincones del Casco Histórico (basuras, papeleras, zonas de aparcamiento, vados, semáforos...).
Con este proyecto, Zaragoza logrará el objetivo de cero emisiones en 2030, gracias a esta apuesta por la tecnología, la innovación y la inteligencia artificial como motores de desarrollo económico, social y de sostenibilidad.