El empresario estadounidense Frank McCourt, expropietario del equipo de béisbol Los Angeles Dodgers, ha anunciado su intención de comprar la plataforma TikTok. McCourt, conocido también por ser dueño del Olympique de Marsella, ve esta adquisición como un paso clave para recuperar el control de la internet. El magnate sostiene que las grandes plataformas están poniendo en peligro a la sociedad, especialmente a los niños.
Durante la conferencia tecnológica Collision en Toronto, McCourt expresó su preocupación por el impacto negativo de estas plataformas en la salud mental de los jóvenes. Citó un aumento en la ansiedad, depresión y suicidios entre los menores como una de sus principales motivaciones para actuar. Señaló que su propio temor por la seguridad de sus siete hijos fue lo que lo impulsó a buscar soluciones.
El empresario busca impulsar una "nueva internet" a través de su iniciativa, conocida como Proyecto Libertad. Este proyecto propone una red descentralizada en la que los usuarios tengan control sobre sus propios datos, eliminando el dominio de plataformas como Instagram, YouTube y X. McCourt argumentó que los algoritmos de estas plataformas son responsables de la creciente polarización social y el caos político, citando ejemplos como la situación en Francia, donde la extrema derecha podría ganar las próximas elecciones.
McCourt considera que adquirir TikTok sería un avance significativo en su lucha por reformar la internet. TikTok, con su vasta base de usuarios, especialmente entre los jóvenes, proporcionaría al Proyecto Libertad una plataforma poderosa para expandir su visión. Según Folha de Sao Paulo, McCourt explicó que la compra de TikTok le permitiría cambiar el rumbo de las redes sociales y devolver el control a los usuarios, evitando que sus datos sean manipulados.
El proyecto de McCourt cuenta con el apoyo de figuras clave, como Tim Berners-Lee, creador de la World Wide Web, y Jonathan Haidt, profesor de la Universidad de Nueva York. Haidt, en su libro The Anxious Generation, subraya los efectos devastadores de las redes sociales en los jóvenes, alineándose con las preocupaciones del magnate.
Sin embargo, McCourt no es el único interesado en la compra de TikTok. El exsecretario del Tesoro de Estados Unidos, Steve Mnuchin, también ha mostrado interés en adquirir la plataforma. Esto se produce en un contexto en el que TikTok enfrenta una posible prohibición en Estados Unidos por razones de seguridad nacional, a menos que encuentre un comprador que no sea chino. El gobierno de Joe Biden ha dado a TikTok un plazo de 270 días para resolver la situación.
A pesar de las incertidumbres sobre si TikTok finalmente se venderá, McCourt sigue firme en su convicción de que este proceso podría abrir los ojos del público sobre el manejo de sus datos. Advirtió que no solo los datos se envían a China, sino que también terminan en manos de otros actores que ejercen un control indeseado sobre la información personal.
