En los últimos meses, los grandes despachos españoles han anunciado la implementación de IA generativa en sus operaciones. Garrigues ha desarrollado su propia herramienta, mientras que para la creación de un sistema adaptado a sus necesidades. Al igual que PwC Tax & Legal, que ha integrado en su uso diario el modelo de la startup estadounidense. En Pérez-Llorca han tomado un camino diferente, de la mano de Leya, la startup sueca que ha creado un asistente legal para abogados.
Pérez-Llorca ha sido el primer despacho español en implementar Leya en su día a día. Lo hizo para tratar grandes volúmenes de datos jurídicos en formato conversacional. Así, los abogados de la firma pueden realizar análisis documental o investigación legal asistida, así como generar comunicaciones y argumentación jurídica. Marisa Delgado, directora del área de Gestión del Conocimiento de Pérez-Llorca, ha respondido a las preguntas de Neosmart sobre la adopción de la IA generativa en el bufete.
Delgado, cuyo departamento tiene un papel central en la implantación de la IA generativa en la firma, destaca que se escogió a Leya después de un estudio concienzudo de las distintas opciones que ofrece el mercado: “Nuestra decisión de integrar Leya se ha basado en un análisis detallado de nuestras necesidades específicas y en cómo esta herramienta podía adaptarse y responder a las particularidades del entorno legal español y europeo, además de ofrecer altos niveles de seguridad”.
Al contrario que otras herramientas, de origen estadounidense, el proyecto de Leya se inició en Estocolmo. La cercanía con el marco legislativo europeo —no en vano Suecia pertenece a la UE— se ve como un valor.
Una vez tomada la decisión queda otra parte crucial: integrar la herramienta en las tareas de los abogados y en el funcionamiento del despacho. “La implementación ha sido el resultado de un esfuerzo colaborativo que ha involucrado a diversas áreas del despacho, principalmente gestión del conocimiento, abogados y departamento de tecnología”, explica Delgado. “Este enfoque nos permite asegurar que cualquier herramienta de IA generativa que adoptemos cubra nuestras necesidades desde todos los ángulos”.
La directora del área de Gestión del Conocimiento cuenta que su departamento ha trabajado con los abogados, que han aportado su visión legal, así como una valoración de la usabilidad de la herramienta y de la calidad de sus resultados. Pero en el proceso también ha intervenido el departamento de Tecnología, cuyo papel consiste en garantizar la seguridad y la protección de la información.
Una herramienta para el día a día
La irrupción de la IA generativa en el sector legal ha obligado a los despachos de abogados a volcar su mirada sobre esta tecnología. La necesidad de implementarla se refleja en el planteamiento de Pérez-Llorca. Se ha implicado al conjunto del despacho en el uso de Leya.
“Todos los profesionales de Pérez-Llorca están participando en un proyecto piloto que nos va a permitir obtener una visión integral de su utilidad”, comenta Delgado en referencia a la herramienta de IA. “Pretendemos con ello evaluar su aplicabilidad en un amplio espectro de tareas legales, desde la búsqueda de información jurídica y la extracción de datos hasta la elaboración de análisis preliminares y la revisión de documentos”.
Son tareas que los abogados de la firma ya han empezado a hacer con la asistencia de la IA. Para Delgado, el objetivo del programa es claro: “Queremos averiguar si la inteligencia artificial generativa no solo mejora la eficiencia, sino si también eleva la calidad de nuestro asesoramiento legal, ajustándose a las necesidades específicas de nuestro despacho y nuestros clientes”.
Y este esfuerzo por discernir el valor de la IA generativa dentro del despacho, una de las cuestiones que se plantea es el rol de los juristas. “Con el avance de la tecnología, el papel del abogado evolucionará”, asegura la directora del área de Gestión del Conocimiento de Pérez-Llorca. “Sin duda, la inteligencia artificial generativa será un gran apoyo para tareas de menor valor añadido y permitirá a los abogados concentrarse en aspectos más complejos y cruciales del asesoramiento jurídico, como el pensamiento estratégico o la innovación en la resolución de problemas legales”.
Delgado incide en que la IA complementará las capacidades humanas pero, y hace hincapié aquí, nunca las reemplazará. “La experiencia humana, el conocimiento jurídico y el juicio profesional siguen siendo insustituibles y centrales en la prestación de un asesoramiento legal de calidad”, señala.
La adaptación al marco legal español y europeo
El mercado es cambiante. Bulle en estos momentos con nuevas herramientas, adaptaciones de los modelos y desarrollos internos. Los despachos se encuentran aún en una fase de exploración. Se ensaya la tecnología y, también, se entrenan los algoritmos. Uno de los casos más paradigmáticos de esta necesidad de alimentar a las herramientas de IA con información especializada es el acuerdo alcanzado entre PwC Tax & Legal y Lefebvre. Esta empresa nutrirá con su base de datos jurídica la versión de Harvey que utiliza PwC.
Precisamente Harvey es el gran competidor de Leya y ha abierto mercado ganándose a algunos de los principales bufetes de abogados. “Somos conscientes de que existen otras opciones en el mercado que también pueden ser interesantes y aportar valor significativo al sector legal”, reconoce Delgado y añade que su firma no se cierra a ensayar alternativas. “En Pérez-Llorca mantenemos una actitud abierta y estamos siempre dispuestos a explorar y adoptar otras soluciones de IA generativa que puedan complementar o mejorar nuestras capacidades actuales”.
Todas estas herramientas son desarrollos fuera de España y el español no es su idioma nativo. Un aspecto importante al tratarse de modelos de lenguaje, que ejecutan tareas en base a instrucciones de texto, introducidas en lenguaje natural. Aunque los sistemas ya cuentan con mecanismos para hacer la adaptación lingüística. Sobre Leya, Delgado afirma que su capacidad para procesar y entender el español garantiza respuestas lingüísticamente correctas.
Además, la herramienta bebe de fuentes especializadas. Su preparación en documentación legal española y europea es notable. En este sentido, destaca el acuerdo alcanzado con la base de datos jurídica Iberley, que permite a Leya mantenerse actualizada con toda la legislación y jurisprudencia española. Desde Pérez-Llorca subrayan que esta cualidad no es común entre otras herramientas del mismo tipo.
“Leya se adapta al entorno legal y lingüístico de España. Utiliza un enfoque basado en un modelo que mejora la generación de respuestas mediante la búsqueda en fuentes específicas. Y esto le permite acceder y analizar una amplia gama de documentación legal española y europea, desde jurisprudencia y legislación hasta bases de datos especializadas en el idioma español”, cuenta Delgado.
La herramienta de IA seleccionada por Pérez-Llorca también permite integrar documentación propia. Con esto se enriquece el proceso y el despacho puede obtener resultados más precisos y contextualizados.
Para Delgado, la adaptabilidad a las nuevas tecnologías está vinculada a la mejora continua del rendimiento del despacho. De esta forma, Pérez-Llorca aspira a mantenerse a la vanguardia en la prestación de servicios legales. “Con la inteligencia artificial generativa buscamos potenciar la eficiencia de nuestros procesos, mejorar la precisión en el análisis y la investigación legal, así como ampliar nuestra capacidad para desarrollar estrategias legales innovadoras”, sostiene la directora del área de Gestión del Conocimiento. Es una fórmula para agilizar el trabajo más rutinario y centrar el talento en los problemas esenciales.