Google ha firmado un acuerdo con la startup nuclear Kairos Power para construir siete pequeños reactores nucleares que suministrarán electricidad a sus centros de datos. Este acuerdo tiene como objetivo agregar alrededor de 500 megavatios de energía libre de carbono, en un momento en el que la demanda de electricidad para los centros de datos y la inteligencia artificial está en aumento. Se espera que las nuevas plantas de energía entren en funcionamiento a finales de esta década.
Aunque Google no ha especificado si los reactores estarán conectados directamente a sus centros de datos o si alimentarán la red eléctrica general, el gigante tecnológico se unirá a empresas como Microsoft y Amazon en la transición hacia la energía nuclear para satisfacer sus crecientes necesidades energéticas. En septiembre, Microsoft anunció que pagaría a Constellation Energy para reiniciar un reactor en Three Mile Island, cerrado desde 2019, mientras que Amazon también planea construir un centro de datos conectado directamente a una planta nuclear en Pensilvania.
La apuesta por los reactores modulares pequeños
Kairos Power forma parte de una nueva ola de startups nucleares que están desarrollando reactores modulares pequeños (SMR, por sus siglas en inglés) con el objetivo de reducir los costos y acelerar la construcción de plantas nucleares. A diferencia de las enormes instalaciones nucleares tradicionales, que suelen generar más de 1,000 megavatios y tardan casi una década en construirse, los SMR prometen una producción más rápida y económica.
El diseño innovador de Kairos incluye el uso de sales fundidas de fluoruro de litio y berilio como sistema de enfriamiento, en lugar de agua, lo que representa un avance respecto a las tecnologías nucleares convencionales. En este sentido, la Comisión Reguladora Nuclear de EE. UU. ha aprobado los planes de Kairos para un reactor de demostración de 35 megavatios, un logro que otras startups nucleares, como Oklo, aún no han conseguido.
No obstante, la empresa enfrenta retos importantes. Aunque ha recibido aprobación regulatoria, no existe todavía ningún reactor modular pequeño en funcionamiento comercial, lo que deja la viabilidad económica de estos proyectos en duda. Además, el diseño de sales fundidas de Kairos se desvía de la experiencia de décadas con reactores enfriados por agua, lo que plantea desafíos técnicos adicionales.
Retos sociales y competitivos
Otro desafío para Kairos podría ser la aceptación pública. Según encuestas de Pew Research, el 56% de los estadounidenses apoya la energía nuclear, pero un 44% sigue oponiéndose, y este número podría aumentar si los reactores se construyen cerca de áreas residenciales. Además, aunque el apoyo a la energía nuclear ha crecido, la energía eólica y solar siguen siendo más populares y económicas en comparación con las nuevas plantas nucleares.
En un entorno en el que startups de fusión nuclear también están compitiendo por desarrollar plantas a gran escala antes de 2035, Kairos se enfrenta a una carrera contrarreloj para cumplir con el acuerdo de Google y demostrar que los SMR pueden ser una solución viable para la energía libre de carbono en el futuro.