Dentons, con más de 10.000 profesionales en su plantilla ha integrado el uso de la IA en su día a día. Los despachos españoles Cuatrecasas y Garrigues han creado sus propias herramientas de IA, para acelerar la revisión de documentos, la búsqueda legal o la generación de escritos.
Existen desde hace tiempo herramientas de inteligencia artificial que se utilizan en los despachos de abogados. La novedad es la inteligencia artificial generativa, aquella capaz de redactar textos y documentos, así como otros materiales, gráficos o sonoros. Y ya hay grandes bufetes de abogados que utilizan esta tecnología en sus operaciones.
Hay que tener en cuenta que estas cifras pertenecen a la primera fase de despliegue de la IA generativa. Apenas habían pasado cinco meses desde que ChatGPT se abrió al público masivo. Con toda probabilidad, los porcentajes habrán aumentado. Y prueba de ello son los anuncios que han hecho grandes bufetes de abogados en los últimos meses.
Dentons
Uno de los bufetes más grandes de abogados del mundo, Dentons, una herramienta propietaria de IA generativa. Se trata de una versión de ChatGPT, basada en el modelo GPT-4 de OpenAI, y la han llamado ‘fleetAI’.
Esta IA propia permite a los juristas de Dentons agilizar la búsqueda y la investigación legal, así como generar textos e identificar argumentos legales relevantes. El sistema está diseñado para que se introduzcan documentos con el fin de analizarlos de forma automática y extraer de ellos datos clave, como cláusulas y obligaciones.
La implementación de esta herramienta de IA es significativa y marca una tendencia en el sector legal, teniendo en cuenta que Dentons cuenta con más de 10.000 abogados y tiene operaciones en 80 países. El bufete, además, ha trabajado con Microsoft para asegurarse de que toda la información que se introduzca en fleetAI se gestione de forma segura. Así, los datos se borrarán después de 30 días y no se utilizarán para entrenar el modelo. La compañía empezó a utilizar la herramienta en agosto de 2023 y ya tiene nuevas versiones en desarrollo.
La IA propia de Gunderson Dettmer
La firma legal Gunderson Dettmer tiene más de 400 empleados, dedicados sobre todo a Estados Unidos, aunque la compañía también tiene presencia en Brasil y otros países. El trabajo de todos ellos se verá reforzado con IA. De hecho, el bufete ya ha lanzado su herramienta ChatGD, también de uso interno y propietario. Tiene dos funciones principales: un chatbot, al que se puede hacer preguntas generales, y un modo RAG (retrieval -augmented generation), que permite enriquecer las consultas con todo tipo de contexto, como acuerdos legales.
De esta forma, los abogados pueden subir documentos o grupos de documentos y realizar consultas, teniendo en cuenta que la IA se nutrirá de ese contexto para proporcionar las respuestas. La herramienta también permite modificar textos gracias a sus capacidades generativas. Para todo ello, ChatGD emplea modelos de inteligencia artificial de OpenAI y otros proveedores, como Anthropic, los motores de Google o Llama 2, de Meta.
Para llevar a cabo una implementación satisfactoria, Gunderson Dettmer ha creado una guía para que sus abogados sepan cómo utilizar la IA generativa. El objetivo de este documento es crear un marco adecuado de operación para proteger la información confidencial de los clientes y garantizar la precisión y la calidad en el trabajo de la firma.
Garrigues y Cuatrecasas: herramientas propias en alianza con Harvey
Los dos grandes bufetes de abogados en España, Garrigues y Cuatrecasas, también se han sumergido en la IA. La primera ha puesto en marcha su propia plataforma. A su desarrollo han contribuido más de 150 abogados y profesionales de todos los departamentos de la compañía. La herramienta es parte del resultado de una inversión de 64 millones de euros en los últimos cinco años destinados a innovación y digitalización.
La herramienta de Garrigues es propia y combina diferentes modelos, como el de la start-up Harvey, ChatGPT o Vertex Gemini. El bufete de abogados, que cuenta con más de 2.000 trabajadores en plantilla, ha sido uno de los primeros en España en crear una IA propia, destinada a tareas legales.
El otro gran despacho que se ha introducido en la IA es Cuatrecasas, donde trabajan también alrededor de 2.000 profesionales. En este caso, la compañía se ha aliado con Harvey (una start-up en la que ha invertido OpenAI) para crear una herramienta que permite redactar textos, analizar documentos y localizar información jurídica.
La herramienta, de uso interno, se denomina CELIA (Cuatrecasas Experto Legal IA) e integra también tecnologías como GPT-4, de OpenAI. El despacho llevó a cabo una prueba con más de 100 abogados, con el fin de conocer los beneficios que reporta. Cuatrecasas ha comprobado que CELIA puede impulsar la agilidad de las operaciones, dando respuestas para cuestiones del día a día, como una consulta de carácter jurídico sobre un contrato de 400 páginas. También tiene utilidad en la revisión de textos o en procesos de due diligence, así como en la redacción de contratos y otros escritos legales.